Hoy queremos comentarles sobre una de las cuestiones más grandes que nos rodea a nosotros los prestadores de servicios, donde nos encontramos todos los que desarrollamos áreas en las artes digitales. Ya que seas diseñador gráfico, productor audiovisual , animador o editor, esto te va a servir a la hora de responder la gran pregunta, ¿Cuánto cobrar por mis servicios?
A diferencia de un producto, donde se puede cuantificar materiales y definir un precio con margen de ganancia, los servicios involucran completamente el tiempo, conocimiento y habilidad de sus prestadores como materia prima. Características que no suelen tener un estándar a nivel global que te diga exactamente cuanto cobrar.
Por otro lado, el mercado es muy variante, donde existe competencia quien de cierto modo dañan el mercado y clientes que en su desconocimiento no valoran ni entienden la calidad de un trabajo. Pero no todo es malo, ya que también están aquellos que de echo, solo buscan un servicio con gran acabado.
Vamos a conocer las variables involucradas para definir el precio de tu trabajo, de ese modo crear una formula que dejará a un lado la preocupación de pensar en que estoy cobrando menos, o demasiado.
El nivel de conocimiento

Como punto de partida , de acuerdo a tu nivel del conocimiento en lo que realizas, puedes estar categorizado en un nivel básico, intermedio o avanzado. Donde debemos ser conscientes de lo que hacemos y en que nivel nos encontramos. Puede que en el país donde vivas exista reglamentariamente un valor promedio para estos niveles, donde más conocimiento adquirido tengas, significa la oportunidad de cobrar más.
La calidad

Acompañando el nivel de conocimiento, se encuentra de la mano, la calidad de tu trabajo. Recuerda que calidad no es sinónimo de mayor realismo o complejidad del trabajo. Hay tanta calidad en un diseño o animacion 2D, como en una 3D con realismo.
Esta mide los acabados, su función o utilidad, estructura y convencimiento. Es decir, que tan profesional, buena atención en el servicio, presentación sin errores y aceptada por el publico llega a ser tu diseño para el objetivo que ha sido creado.
Un proyecto con calidad se entrega con características muy especificas de parte del cliente, y cumplir con ellas a su mayor perfección, es la oportunidad de aumentar el valor de su precio.
La experiencia
Es el tiempo en que llevas desarrollando, practicando y perfeccionando tu labor. Y no solo se cuentan los proyectos vendidos a un cliente, como normalmente adjuntarías en tu hoja de vida o currículo, sino desde el momento en que has empezado a estudiar, donde has realizado micro proyectos, hasta los más elaborados al día de hoy. Siempre y cuando puedas justificarlo y demostrarlo. Es aquí donde entra tu portafolio.
Recuerda que para un cliente, la experiencia es sinónimo de garantía y seguridad, ya que entiende que con el tiempo, te has especializado perfeccionado lo que haces. Por lo que a mayor experiencia, tienes la posibilidad de subir tu precio.
El tiempo

Es una variable que multiplica el valor de tu precio. Siendo una de las materias primas esenciales en un servicio. A mayor tiempo empleado para realizar el servicio, mayor será su costo.
Pero debemos tener en cuenta que tiene un margen eficiente. No es favorable demorarse semanas haciendo un proyecto pequeño, ni pocos días, un proyecto grande. Si tienes la destreza de realizarlo en un menor tiempo que el promedio, conservando la calidad y trabajando sin estrés ni apuros, puedes aumentar tu precio. Como un acuerdo con tus clientes. los cuales hoy en día aprecian y buscan esta cualidad, dándote ademas ventaja ante la competencia.
El mercado
Por ultimo, está revaluar tu precio con los del mercado. En un estudio puedes averiguar cuánto se está ofertando y cuanto se esta pagando por trabajos similares. Esto lo puedes hacer de manera local, nacional o internacional, de acuerdo al mercado que deseas atacar. Cotizando en empresas y con particulares, o a través de sitios de freelance donde ofertan servicios.
Con el promedio del mercado podrás ajustar tu precio para que sea competitivo. E identificar mejor donde ofrecer.
Conclusión
En conclusión, la formula quedaría así:
(nivel de conocimiento + calidad + experiencia) * el tiempo
y su resultado aproximado al promedio del mercado. Te da un valor que puedes utilizar para cobrar por tus servicios.
Si el cliente no acepta tu precio, es porque no es el cliente indicado.
En un próximo post hablaremos de como presentarte profesionalmente como freelance. Comentándote tips claves para lograr ventas exitosas.
Esperamos que te haya gustado este post, y nos apoyes con tu like y comentarios.
Genial, me gusto mucho esa conversión.